ELECTROENCEFALOFIA (EEG)
Mide las señales eléctricas del cerebro en la
superficie del cráneo, porque los impulsos nerviosos transmitidos por las
neuronas son de naturaleza electroquímica. Un encefalograma registra los
impulsos eléctricos producidos por la actividad cerebral, generados en forma de
ondas de distintos tipos, y sigue sus variaciones en el transcurso del tiempo.
La presencia de ondas anormales ayudan a diagnosticar epilepsias, tumores y
otras alteraciones neurológicas.
TOMOGRAFIA AXIAL COMPUTARIZADA (TAC)
Es una imagen
de rayos X mejorada por computadora, y su resolución es mayor que la de las
radiografías convencionales. La computadora analiza múltiples imágenes y las
ordena en una sola, que nos ofrece una sección única del cerebro. Genera
imágenes de la anatomía del cerebro y sirve para medir el flujo sanguíneo
cerebral o diagnosticar lesiones y tumores cerebrales. Pero la visión que se
obtiene del cerebro es estática y sólo permite explorar la estructura, pero no
la función del cerebro.
TOMOGRAFIA POR EMISION DE POSITRONES.
Describe la actividad metabólica de diferentes
áreas cerebrales y muestra como cada área gasta su combustible químico: la
glucosa. La técnica consiste en inyectar al sujeto 2-desoxiglucosa, una
molécula análoga a la glucosa que lleva un isótopo de flúor y que además, no
puede ser metabolizada, por lo que se acumula en el interior de las células más
activas. . El isótopo de flúor emite unas partículas subatómicas, los positrones,
que dan origen a la radiación que detecta el equipo de TEP. Así los
investigadores observan que áreas del cerebro desarrollan más actividad: si es
cuando la persona sueña, escucha música o lee un libro. Esta técnica
proporciona imágenes e la función encefálica viva en tiempo real, y ha
revolucionado el estudio de los procesos cognitivos humanos.
IMAGENTES POR RESONANCIA MAGNETICA.
Un detector
registra la forma en que los átomos de hidrógeno responden dentro del cuerpo a
un campo magnético. Cuando los átomos liberan señales, estas son procesadas en
imágenes por la computadora; las imágenes representan las concentraciones de
esos átomos. El resultado es una imagen detallada de los tejidos blandos del
cerebro. Esta técnica revela detalles anatómicos y registra información
fisiológica y bioquímica de los órganos y tejidos, sin que sea necesaria la
inyección de colorantes o sustancias radiactivas. Así, los neuropsicologos
observan el cerebro como si fuera transparente.
ANGIOAGRAFIA CEREBRAL.
La angiografía cerebral es un
procedimiento en el que utiliza un tinte y rayos X para ver cómo fluye la
sangre a través del cerebro. La prueba consiste en colocar una sonda hueca y
delgada (catéter) a través de una arteria normalmente de la ingle y se va
subiendo cuidadosamente a través de los vasos principales del área del abdomen
y el tórax hasta una arteria en el cuello. Una vez que el catéter está en su
lugar, se inyecta el medio de contraste, y se toman las radiografías para ver
cómo se desplaza por los vasos sanguíneos del cerebro. El tinte ayuda a
resaltar cualquier obstrucción del flujo sanguíneo. Después de tomar las
radiografías, se retiran la aguja y el catéter y se coloca un vendaje apretado,
para controlar el sangrado. La angiografía cerebral se utiliza para identificar
o confirmar problemas con los vasos sanguíneos en el cerebro. Puede
experimentarse un dolor breve y agudo a medida que se inserta el catéter, y una
sensación de presión a medida que se desplaza.